Muchos lectores estarán familiarizados con el trabajo de Robert Chambers, incluyendo sus seis ‘prejuicios’ del desarrollo profesional a saber: espacial, proyecto, persona, estacional, diplomático y profesional, y con sus sugerencias para superarlos. Muchos también estarán familiarizados con lo difícil que es poner sus consejos en práctica, notablemente en las misiones de corta duración. La pregunta que se hace aquí, es que cosa constructiva puede hacer el consultor/a respecto a las personas que se encuentran de ‘últimas’ en la escala del desarrollo y al hacerlo, volver un poco más visible lo invisible. Este artículo contiene cuatro ilustraciones tomadas de la experiencia del autor en Mozambique, Malawi, Bangladesh, y Zimbabwe. Todas estas muestran los intentos hechos para aplicar las ideas de Chambers. Todas son modestas en escala, alcance y en lo que se quiere lograr. El propósito principal al describir estos casos es estimular la discusión sobre las posibilidades de incorporar las ideas de los procesos de desarrollo participativo e incluyente dentro de los confines poco promisorios de una misión de dos a tres semanas. |