La creciente crisis de la deuda externa en el Sur se ha convertido no solamente en el foco del debate de la política multilateral, sino también en forma creciente, en una campaña anti-deuda vocalizada a nivel internacional, cuya influencia fue claramente abortiva en la Organización de Comercio Mundial en Seattle, Diciembre de 1999. Aunque efectiva, sin embargo, la campaña anti-deuda envuelve un número de diferentes posiciones, las cuales resultan en diversas estrategias y tácticas.